viernes, 9 de enero de 2015

El abuelo, el nieto y el burro

Un abuelo y su nieto se fueron de viaje con un burro. 
Vector illustration of Cartoon burroEl nieto pasó las vacaciones con su abuelo y volvía a casa para empezar el colegio. A veces iba el abuelo o el nieto montado en el burro para no cansarse tanto.
El primer día llegaron a un pueblo. El abuelo iba en el burro y el nieto al lado. Los ciudadanos del pueblo se quejaban cuando los veían y decían:
-¡Que viejo tan egoísta! Él, en el burro y el niño, al lado.

Después de pasar a los ciudadanos, el abuelo se bajó del burro, siguieron caminando los dos al lado del burro y llegaron a otro pueblo. Sus habitantes se rieron de ellos diciéndoles:
-¡Qué tontos! Tienen un burro y no se montan.

Después de irse de ese pueblo, el abuelo subió a su nieto al burro y llegaron a otro pueblo. Estos, al ver al niño en el burro y al pobre abuelo andando, dijeron:
¡Ay que ver qué niño más malo! Pobre anciano, andando.

Cuando salieron del pueblo, los dos se subieron al burro y juntos llegaron a otra población. Los ciudadanos, quejándose, decían:
¡Qué dos! ¡Pobre animal! A las afueras del pueblo, el anciano y su nieto se pusieron el burro en sus hombros y llegaron a otra aldea. Los aldeanos se reían de ellos y decían:
¡Qué tontos! Tienen un burro y, en lugar de montarse en él, lo llevan a cuestas.

Al salir de allí el abuelo se queda pensando y al rato le dice al nieto:
-Hijo, hay que tener opinión propia y no hacer caso de lo que te diga la gente.




María García Sánchez                                            2 ESO B

1 comentario:

  1. Recuerdo que mi padre me lo contó hace mucho. Me quedé pensando cuánta razón tenía.

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